Práctica docente en
educación básica
Introducción
Cada
vez que hablamos de la práctica docente se escuchan diversos comentarios,
algunos a favor y otros en contra de los encargados de la educación de los
alumnos, pero pocos son lo que se han puesto a pensar que es lo que conlleva el
dedicarse a esa profesión, que para algunos es tan “fácil” como llegar a
sentarse y “vigilar” a los educandos, aunque en realidad es mucho más
complicada que eso.
Durante
las 5 semanas que hemos trabajado con las actividades de la maestría en
educación básica me he dado cuenta de cosas que implica el trabajo escolar que
no comprendía ni utilizaba, por lo tanto estaba incompleta y repercutía en el
aprendizaje de los niños.
Análisis
de la práctica docente
Desde el modelo educativo
Nacionalista que buscaba unir a los mexicanos por el mero amor a su país,
pasando por la educación rural que pretendía una mayor cobertura, la educación
técnica que intenta cubrir las vacantes de la industria con personal realmente
capacitado hasta la educación actual, que trata de formar individuos capaces de
competir al nivel de cualquier persona del mundo, pues la globalización se ha
apoderado de cada rincón del mundo.
Conforme
ha pasado el tiempo ha ido cambiando nuestra forma de ser, pensar y ver el
mundo que nos rodea, por lo tanto la manera de enseñar también debe
modificarse. Algunos de nosotros fuimos a
la escuela y aprendimos con el método “antiguo”, donde el maestro se paraba frente
a nosotros para pasarnos el conocimiento que poseía, como alumnos únicamente éramos
receptores y pocas veces existía alguna preocupación acerca de cómo lo
aplicábamos a la vida cotidiana.
Durante el tiempo que estuvimos en
la escuela vimos pasar una serie de reformas, (en mi caso 1993 y 2011) las
cuales trataban de adecuar nuestra vida escolar para que se relacionara con
nuestra vida cotidiana, lo que se demuestra con la integración de nuevas
materias (ingles y computación) al curricula, tratando de escolarizarlas y
considerarlas como de relleno, pues en la actualidad el idioma extranjero y el
manejo de aparatos tecnológicos son parte de las competencias que debemos
poseer para estar al nivel de todos los miembros de nuestra sociedad.
Lo anterior es teóricamente
acertado, pero difícil llevarlo a la práctica, pues implica una enorme cantidad
de trabajo para los implicados en el proceso educativo (maestro, alumnos y
padres de familia), pues se presentan algunos problemas y paradojas durante el
proceso.
Según
los documentos y acuerdos para educación básica como el artículo tercero, ley
general de educación y programa sectorial la educación básica debe ser laica,
gratuita, obligatoria e integral, que debe incluir lengua adicional al español
y manejo de tecnología educativa, lo cual es difícil de hacer, debido a que la
infraestructura no lo permite, pues hay lugares donde la cobertura no puede ser
total ya que no hay ni aulas ni maestros o los grupos están muy saturados. Es
francamente contradictorio que se diga que la educación es obligatoria y no se
posea lo necesario para brindarla.
Otra refutación por parte del magisterio es
por los nuevos planes y programas de estudio, que incluye las 2 nuevas materias (mencionadas anteriormente),
esperando que los docentes las apliquen sin contar ni con materiales ni
preparación necesaria para poder impartir, por lo que tenemos que reinventar
actividades y en ocasiones por nuestra poca o nula experiencia no resultan
tan bien como esperábamos.
Los
maestros nos encontramos en constante actualización para tratar de estar al
nivel que nuestros alumnos exigen, pero hay veces que los costos de este
servicio están demasiado altos y no es posible continuar, aunque por parte de
secretaria se ofertan algunos diplomados, por lo que los maestros que no sean
rejegos al cambio podrán seguir mejorando sus competencias profesionales y
compartiendo sus experiencias, que en lo personal me parece el recurso más
valioso para lograr corregir lo necesario en nuestro trabajo de todos los días.
Otra
de las paradojas es la creada por el amplio total de actividades presentadas en
los trabajos por proyectos en la que el tiempo destinado al horario de clase es
muy poco, ya que no se alcanza a cubrir lo necesario. Para tratar de contrarrestar
este problema se han creado programas como el de escuela de tiempo completo que
busca aprovechar al máximo lo propuesto por la curricula.
Todas
las anteriores son muy buenas propuestas pero exigen un amplio compromiso por
parte del educador, cosa que no todos tenemos, ya que como mencionamos
anteriormente, muchos de los estudiantes no saben en lo que se están metiendo
cuando eligen dedicarse a la docencia, viéndola como una profesión fácil, que
no exige mucho esfuerzo y además con un sueldo económicamente aceptable. Es muy
importante que los jóvenes posean una verdadera vocación de servicio, pues es
la principal cualidad del maestro, sin mencionar que es poco apreciada.
Es
necesario mencionar que el profesor como parte del sistema educativo no es
autosuficiente para poder consolidar las competencias que presenta la
curricula, es de vital valor que se apoye en los padres de familia e
instituciones de la comunidad, tanto escolar como externa. Los consejos
escolares de participación social son una gran opción para poder aprovechar lo
bueno del trabajo en equipo, además de involucrar a los miembros de la sociedad
en la mejora de la institución. Algo que debemos dejar muy claro sobre este
tema es la importancia de las reglas y lineamientos de los CEPS, pues si no delimitamos
las atribuciones de los miembros de este se pueden malinterpretar las funciones
de algunos y causar un problema, que aunque sea en busca de una mejora no deja
de ser molesto.
Otra
de las partes que es necesario analizar en la práctica educativa es la
evaluación, que maneja dos vertientes según su función: académico – técnica y
político – internacional.
En
la primer vertiente (académico – técnica) el propósito es darnos una estimación
acerca de la educación que se está dando en alguna institución, esto con fines
distintos y de acuerdo a ellos son los elementos que intervendrán en el proceso,
aunque estos son considerados incuestionables e inamovibles, cosa que no es muy
recomendable, ya que no atiende a la heterogeneidad del mundo en que vivimos.
Este tipo de evaluación es muy común dentro de los centros escolares de
diferentes niveles, pues nuestras autoridades nos piden a manera de requisito
el expresar lo observado a lo largo de cierto periodo en un numero, lo que a mí
me parece difícil, pues el ver trabajar a los alumnos por un mínimo de 2 meses
y únicamente asignarle una cantidad es bastante complicado.
La
segunda vertiente trata de ser un poco más humanista, ya que toma en cuenta
algunos de los problemas sociales que intervienen en el proceso educativo, lo
cual puede resultar contraproducente, pues la muchas veces la cultura del
mexicano es la de tratar de pasarse de listo y se escudan este discurso para
trabajar lo menos posible y no tener que dar ningún esfuerzo en la mejora. Esto
desvirtúa esta intención y por tanto está siendo arrollada por la académico –
técnica, dándole un mayor poder y convirtiendo en obsoleto el segundo
paradigma.
En el ámbito nacional la evaluación
se ha ido renovando a la par de la tecnología, aunque los parámetros no son
distintos a lo expresado en la evaluación sumativa y sistemática, donde toma la
función de discriminar y clasificar a las personas de acuerdo a los resultados,
donde los que son más altos poseen los mejores puestos y los más bajos son
considerados inadecuados y se les asigna un estatus más bajo, incluso en la
admisión para diversas instituciones educativas se ha creado CENEVAL que es el
único centro de evaluación que cuenta con validez oficial en México y al que
recurren la mayoría de las instancias pedagógicas.
En
el ámbito internacional la evaluación está determinada por diversos organismos,
culturales (UNESCO) y económicos (OCDE, FMI, BM, entre otros), que con
diferentes intenciones tratan de “medir” las capacidades que poseen los
diversos países en relación con otros. Para esto se realizan una serie de
exámenes estandarizados, donde sin tomar en cuenta las características
individuales de cada nación se aplican, en México se lleva a cabo ENLACE Y
PISA, que arrojan resultados en ocasiones sorpresivos y donde casi siempre
somos de los más bajos.
Aunque
no culpo del todo a los organismos internacionales por aplicar exámenes
estandarizados para evaluar de manera sumativa las “capacidades” de un grupo de
personas y asignar recursos monetarios basado en ese criterio, incluso en todos
los niveles, en referencia a la evaluación existen tensiones con las que
debemos lidiar y el sentido que se le da depende de la forma de pensar del
evaluador.
Hay
que tomar la evaluación como un proceso mas formativo que obligatorio, ya que
es muy común hacerlo solo como acreditación para algún beneficio más
superficial que el aprendizaje, sin mencionar que el deber ser no siempre es la
solución, debemos ser capaces de adecuar
según las necesidades de nuestros alumnos.
A
manera de conclusión
Como
lo mencionaba anteriormente la globalización esta apoderándose de cada rincón
del planeta tierra, con todas las implicaciones que esta trae, creo que es
demasiado tarde para intentar detenerla, ya que estamos en la era de la
información y comunicación, todos los días estamos más inmersos en el mundo
entero. El maestro nunca debe dejar de ser un luchador social que denuncie la
injusticia y falta de equidad, pero debemos dejar de quejarnos, el futuro de
nuestros alumnos está en nuestras manos, conjuguemos los aprendido a lo largo
del primer modulo de la Maestría en educación básica con los conocimientos que
ya poseíamos, las experiencias de nuestros compañeros y las vivencias de todos
los días al lado de nuestros alumnos. Busquemos competir a la par de las
naciones más desarrolladas del mundo, ese es el reto, pero reformulando nuestra
forma de pensar, esforzándonos por aprender y trabajando duro será posible.
L. E. P. José de
Jesús Roque Castillo
No hay comentarios:
Publicar un comentario